Nunca se fueron. Siempre están ahí. Cierto que no de una manera tangible, física. Ni siquiera virtual, porque ya ni un sms hemos cruzado. Pero por más que pase el tiempo, no entiendo por qué, siempre están. Siempre me queda ese no sé qué... que me da la impresión que aún están ahí. Incluso me animo a pensar que no son reales, que son proyecciones que creé yo mismo, porque en verdad me parece que son eso. Siempre en mi mente, pero fueron mi mejor invento. Pero de lo que el tiempo debería borrar, siempre hay algo que lo trae de nuevo a mis pensamientos y recuerdos. Una matrícula. Un cartel de un kiosco. El nombre de una calle (vaya ocurrencia llamar así a una calle tan distante!). El color de una bufanda. Tantas cosas. Y todo vuelve. Tan cercano, tan vívido, tan... real. ¿Qué hacer? Creo que lo más sano es seguir con la "medicación" actual. Y que el Tiempo haga su trabajo de una vez.
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