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viernes, 25 de octubre de 2013

La de "El día de los IDIOTAS!"

Día largo como pocos hoy. Hablando en términos de Einstein. Creo que los días se sienten más largos cuando te cruzás con una especie de sub-humano, perteneciente al orden homo casi-sapiens, que de una forma u otra busca y trata de amargarte la existencia. Hoy me crucé con varios idiotas.  Pero tres de ellos son destacados. Cuatro a decir verdad. Dignos de mención. En fin, paso a detallar. Podríamos hablar de varias "subdisyuntivas" hoy. Pensaba hacer tres posts, pero calculo que con uno alcanza y sobra. Una, porque no son dignos de más teclas. Dos, porque a medida que vaya escribiendo, si me acuerdo de otro idiota, lo voy a postear.

Sub-disyuntiva número 1: La de "Con amigos como vos..."

Protagonista: Yo
Antagonista: Idiota número 1. El amigo devenido en inspector de tránsito. 

Poca gente sabe lo que es el verano salteño. Caluroso como pocos. Digo, por algo están instalando acá una de las granjas solares más grandes, porque Salto justamente es el "punto más luminoso" de América Latina. Gracias. Por eso odio los veranos. En fin. Los primeros calores se están empezando a sentir. Volvía al mediodía hacia casa en la super Winner, cuando veo en una esquina, uniformado, sudoroso, a un "amigo" al que no veía hace tiempo. Estaba dirigiendo el tránsito. Como no podía dejarlo ahí en ese calor así nomás, di la vuelta, y generoso, le alcancé un refresco frío que había comprado. A continuación el diálogo.

Él : "Fernando, ¿sos vos?"
Yo. "Síiii tanto tiempo!!! Cómo andás?"
Él : "Bien, loco, bien. Meses  sin verte. ¿Trabajando?"
Yo; "Volviendo. De cruce te vi, y pensé en alcanzarte este refresco. Mal no te va a venir."
Él; "Oh! qué bueno! no no, me viene excelente!. Che, me enteré que tenés una beba."
Yo: "No no, es mi sobrina. Te mostraría una foto. Pero ando sin los documentos."

Sí, sé lo que estás pensando. Con esa confesión me regalé.

Él: "Sin los documentos?.. Emmmm, pará por ahí, pará un poquito."
Me moví hacia donde indicaba, pensé que lo estorbaba donde había parado.

Él: (Escribiendo un papelito, me lo dio) "Cuando tengas un tiempito, andá por tránsito con este papel y llevá los documentos."
Yo: "¿El qué?"
Él: "Sí, así no te cae la multa."
Yo: (Con cara de idiota. Sí, más todavía.) "Eeee ¿multa?"
Él : "Sí. Andás sin los documentos, ¿no?"
Yo: "Esteee, errr, sí."
Él; "Bueno, tenés tres días para llevar tus documentos a Tránsito con este papel".
Yo: (Incrédulo y sin entender lo que acababa de pasar.)"Emmm bueno, esteee, me voy. Gusto en verte."
Él: Chau, loco, que andes bien.
Yo: "Ojalá te ahogues con la Coca-cola."
Yo: (Lejos y ya gritando) "¡Y SE DICE GRACIAS!"

Ta, de esto no digan nada.

Sub disyuntiva número 2: La de "Inversamente proporcional"

Protagonista: Yo
Antagonista: Cajera de Western Union.

Apurado, llegué hasta la ventanilla donde esta cajera estaba de risas con sus compañeras. Vestía un vaquerito muy ajustado, se notaba que podía usar una talla más, y una camiseta muy escotada que dejaba ver mucho de sus dones, que a decir de Don Enrique VI de Les Luthiers, no cabían en su soutien. O como carajo se escriba. Eso se veía al primer golpe de vista. Así pasó:

Cajera: "Hola! En qué te puedo ayudar?"
Yo: "Buenas, quiero hacer un giro"
Cajera: "Bueno. ¿Tu cédula?"

Se la extiendo. No veía nada. Se pone la cédula en la nariz.
Cajera: "Te llamás ....?" pregunta mi nombre y apellido, leyéndolos en el documento.
Pensé por un momento en decirle;: "No, falsifiqué esa cédula porque me encanta perder tiempo." Pero creí mejor dejar la ironía para otra vuelta.

Yo: "Sí, soy yo."
Cajera: "¿Dirección?"
Se la digo.
Cajera: "¿Teléfono?"
Se lo digo.
Cajera; "¿Celular?"

Se lo... ¿qué?... nunca me pidieron el celular.
Yo: "No tengo", mentí, mientras sonreía.
Se sonrió

Cajera;: "¿Quién recibe?"
Le extiendo el papelito impreso.
Se lo lleva a la nariz.
Lo lee a los gritos. Dios mío, qué voz chillona que tiene.
Confirmo los datos. Me devuelve los documentos.
Cajera: "¿Pagas en pesos?"
Yo: "Sí, por favor."
Agarra una calculadora. Empieza a apretar numeritos. Pensé que capaz la computadora que tenía enfrente servía sólo para el solitario. Pero luego me di cuenta que si UNA CALCULADORA representaba semejante dificultad para su diminuto cerebro, no quiero pensar una computadora.
Cajera: "Margaritaaaaa! ¿Cómo calculo si es en dólares pero paga en pesos?"
Pienso; "Dios mío, no me hagas esto".
Le explican.
Cajera. "¡Ay, vení porque no entiendo!"
Le explican de nuevo
Cajera;: "No entiendo nada, ji ji ji"
ME entro a desesperar. Ahí le calcularon.
Le pago. Me da el recibo. Miro el recibo. EL NOMBRE ESTABA MAL.
Dios mío, inútil al por mayor, no lee, no escribe bien, no calcula... ¿cómo entraste a trabajar ahí?
Se lo hago notar.
Cajera (se retira hacia atrás en la silla dejando ver todo su cuerpo y zapatea en el piso) "Ay, Margarita!! Qué hago?? Qué hago??"
Le explican que llene no sé qué formulario
Cajera;: "No lo encuentro! Dónde está??" (Ni lo buscó)
Se lo alcanzan.
Cajera: "¿Qué pongo entonces?"
Le indican.
Cajera: "Ya está, ¿ahora qué hago?"
"Morite", pienso.
Le dicen que lo mande por fax. Le dan el número.  No sabía hacer andar el fax. Mientras esperaba, paseaba sus bondades frente a mí. Obviamente no sabía que yo no le estaba mirando el escote, sino la yugular. Sólo quería irme. Matarla primero, claro, y luego irme.
Se sigue paseando. Me quiere dar conversación. No me importa.
Se inclina. Deja ver el escote mientras me mira sonriendo. Le dedico una mirada de desprecio. Se nota que mucho cerebro no tiene, porque no la entiende.
Al final, una hora y cuarenta minutos después, lo solucionan.
Firmo el papel y contesto con un frío "Chau" a la sonrisa que me dedicaba mientras mostraba el chicle que masticaba. Dios mío, este mundo está lleno de gente inútil.

Sub-disyuntiva número 3: La de "Nada... me voy caminando." 
O "Jodida historia de Taxi".

Protagonista: Yo.
Antagonista: Idiota número 3. El radio operador de Taxis.... 

Operador. "Taxis XXXXX, buenas tardes"

Yo;: "Hola, necesito que me mandes un taxi a XXXXXXX ocho uno cuatro"

Operador "¿Siete cinco cuatro?"
Yo: "No, ocho uno cuatro".
Operador :"Aaaaah, cinco nueve cuatro"

Yo: "No, escuche bien: ooooocho uuuuunoooo cuuaaaatroooo"
Operador:" Nueve cinco cuatro?"

Yo: "¡NOOO, OCHO CATORCE! ¡OCHO CATORCE!"
Operador :"Ah ahora síii!, entendido, xxxxxxx 814! Mirá, no tengo coche disponible todavía, vamos a demorar una hora más o men..."

Colgué


1 comentario:

Dani dijo...

No me digas que te vacunaron por pelotudo, ja ja ja ja ja