Hoy tuve que usar el transporte público, aka ómnibus, para regresar a casa. Como siempre, es un servicio venido a menos, mal administrado y peor mantenido por un intendente que fundió por primera vez en siglos una Intendencia... en fin, tema para otro post. El tema es que volvía en un ómnibus atestado de estudiantes, el 80% planchas, que ocuparon los asientos en detrimento de la gente mayor que subía. Francamente, me costó acomodar la mochila y ceder el asiento a una viejita que ni me lo agradeció y estaba más apurada porque me fuera que otra cosa, hasta me dio un "empujoncito" para introducirse ella antes que yo hubiera salido del asiento. Vulgaridad al por mayor. Lo que me dejó bien fue que una parejita tomó nota de mi ejemplo e hicieron lo mismo. Ambos cedieron sus asientos a unos viejitos. No está todo perdido. No todavía. Hay valores. "Todavía da criollos el tiempo."
Hablamos tu idioma... o tratamos al menos.
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lunes, 20 de abril de 2015
La de "No está todo perdido."
Hoy tuve que usar el transporte público, aka ómnibus, para regresar a casa. Como siempre, es un servicio venido a menos, mal administrado y peor mantenido por un intendente que fundió por primera vez en siglos una Intendencia... en fin, tema para otro post. El tema es que volvía en un ómnibus atestado de estudiantes, el 80% planchas, que ocuparon los asientos en detrimento de la gente mayor que subía. Francamente, me costó acomodar la mochila y ceder el asiento a una viejita que ni me lo agradeció y estaba más apurada porque me fuera que otra cosa, hasta me dio un "empujoncito" para introducirse ella antes que yo hubiera salido del asiento. Vulgaridad al por mayor. Lo que me dejó bien fue que una parejita tomó nota de mi ejemplo e hicieron lo mismo. Ambos cedieron sus asientos a unos viejitos. No está todo perdido. No todavía. Hay valores. "Todavía da criollos el tiempo."
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2 comentarios:
Amigo, tu mayor virtud es tu principal problema. Tienes un alma hermosa, siempre lo dijimos quienes te conocimos. Siempre buscando que poder hacer por el semejante. Ese complejo de protector, de defensor del debil, es hermoso, pero te deja demasiado expuesto. Me alegro que te sientas desahogado, estabamos muy preocupados de verte como dividido en dos, como que estabas rechazandote a ti mismo. Tu Dios no se olvidara de lo bueno que has hecho y te lo devolvera por cien veces. Te mando un beso.
Anita
Muchas gracias querida. ¿Por qué la gente que quiero tener cerca está tan lejos? Trato de recordar la promesa: Mil risas por cada lágrima. Te mando un abrazo a la distancia.
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