Y fue a raíz de un episodio de Dr. House. Foreman lo traicióno abiertamente, Cuddy casi lo despide. ¿Su reacción? Sencillamente miró a Foreman, supo y le dijo con la mirada "sé que me traicionaste" y sencillamente sonrió. En ese momento dije "Quisiera yo poder hacer lo mismo". Tal vez algún día pueda reconocer y hacer lo mismo. Na, no me salió en su momento, no creo que me salga ahora. Sencillamente trataré de vivir como decía aquel viejo tema de Radiohead. Ésta fue mi última pelea, mi último berrinche. Tomaré una vida tranquila, como adormecida, sin alarmas, sin sorpresas, sin alarmas sin sorpresas por favor. Tal vez, como en la canción, haya una parte de mí que de fondo grite "¡Sáquenme de aquí!". Pero me parece lo mejor. ¿Motivo? Llamémoslo respuesta a mis oraciones. Literalmente. Entendí el mensaje. Dejaré que Él se encargue de lo que yo no puedo. Y seguiré el consejo de una amiga que adoro como si fuera mi hermana de sangre: "Vas a ser feliz. Sólo que tal vez no de la forma que pensabas o cómo pensabas. Sólo tenés que hacer tu parte, y Él se encargará del resto." En su momento esas palabras me calmaron. Me llegaron al fondo. Hoy las veo reales. Y sí. Así un día, tal vez un día...
No hay comentarios:
Publicar un comentario